El Villarreal cayó ayer por 3-0 ante el Real Madrid en el estadio Santiago Bernabéu en un partido en el que fue de más a menos. Pese a la derrota, los amarillos se mantienen en la cuarta plaza de la clasificación con seis puntos de ventaja sobre el Athletic y el Celta, que son sus inmediatos perseguidores, cuando restan tan solo cuatro jornadas (12 puntos) para que finalice la Liga.
En su tercer partido en tan solo seis días, Marcelino realizó cinco cambios en el once con respecto al último equipo titular del partido ante el Rayo Vallecano. El Submarino se defendió con un orden excelente en la primera mitad. Los atacantes blancos no encontraban resquicio alguno para crear oportunidades de gol, mientras los amarillos esperaban agazapados para cazar un mortífero contragolpe.
El Villarreal intentó anotar hasta el pitido final del colegiado, pero no lo consiguió. El Submarino ya piensa en el próximo partido ante la Real Sociedad en El Madrigal (domingo, 20.30 horas).
El entrenador del Villarreal CF, Marcelino García Toral, lamentó la derrota pero se mostró optimista de cara a las cuatro jornadas que restan para que finalice la Liga: «Van avanzando las jornadas y sacamos seis puntos a los que nos siguen, que además se enfrentan entre ellos en un partido. Dependemos de nosotros y hay que ir paso a paso. El domingo jugaremos una auténtica final ante la Real Sociedad. Si ganamos los dos de casa creo que lo conseguiremos. Jugamos en nuestro estadio y necesitamos a la afición. Estos jugadores llevan una paliza muy grande encima y su aliento puede ser fundamental».