Glamour, personalidad, amplitud, naturalidad… Las razones por las que incluir un revestimiento blanco brillo en nuestra cocina pueden ser muy variadas. Cuando hablamos de tendencia en azulejos de cocina, el color blanco se ha coronado como una de las opciones preferidas dentro de los hogares. Si a esto sumamos la capacidad del material cerámico para generar acabados brillantes y pulidos, el resultado es una unión perfecta que hará las delicias de todos aquellos que busquen aportar un carácter propio y atemporal en sus cocinas. Desde el clásico Alaska hasta el bohemio Mayolica Rust, existe una gran cantidad de opciones que encajarán con tu estilo de vida.
Es habitual que nos puedan surgir ciertas dudas a la hora de decidirnos por un material con acabado blanco brillo. En Pamesa hemos tomado nota de ello y queremos contarte todos los consejos y secretos que envuelven esta tipología de producto. De esta manera, podrás llevar el diseño de tu cocina ideal a otro nivel. Acompáñanos a descubrirlos.
¿Qué azulejos escoger para la cocina?
La versatilidad y popularidad de los materiales blanco brillo, ha provocado que podamos encontrar una gran cantidad de modelos en el mercado. Entonces, ¿Cómo podemos saber qué producto se adapta mejor a nuestra cocina?
Una de las claves para acertar con la elección del material es prestar atención al factor forma de la estancia que vayamos a revestir. Si contamos con un espacio limitado, podemos recurrir a las pastas rojas y blancas, por ejemplo, el modelo Tripoli sería una gran opción. Su variedad de formatos, formas, decorados y relieves, nos darán la posibilidad de complementar ese frontal blanco y reluciente con una pared decorativa que divida la zona de trabajo, distribuyendo con estilo y mucha personalidad las distintas zonas de la estancia.
Si, por el contrario, disponemos, de una gran zona que cubrir, la elección es clara: el porcelánico es nuestra mejor opción. La disponibilidad de grandes formatos y su polivalencia, nos permiten cubrir grandes espacios omitiendo o disminuyendo las juntas entre el material, aportando un grado de sofisticación y continuidad imposible de encontrar en otros materiales. Además, las excepcionales características técnicas con su bajo índice de absorción, hacen este material perfecto para ser empleado en zonas húmedas.
¿Qué se limpia mejor, mate o brillo?
Llegamos a uno de los debates más sonados cuando dudamos entre colocar un revestimiento blanco brillo o mate, ¿Qué se limpiar mejor? ¿Realmente es útil un acabado brillo en una cocina?
Son preguntas de gran interés pues el tiempo y dedicación que se emplea en las tareas del hogar puede ser un hándicap cuando estamos decidiendo los materiales que pasarán a formar parte de nuestro día a día. Los azulejos con acabado blanco brillo cuentan con una gran ventaja, su superficie lisa hace que sean más fáciles de limpiar, permitiendo retirar toda la suciedad de una manera rápida y sencilla. Bastará con pasar un paño húmedo para hacer que la superficie del azulejo recupere todo su brillo. Esta característica nos resulta muy útil por la propia naturaleza de un espacio como es la cocina, que requiere de cuidados recurrentes con cada uso. Por este motivo, elegir un material con un mantenimiento tan sencillo como un revestimiento blanco brillo, nos ayudará a ahorrar tiempo cuando tengamos que echar mano a los productos de limpieza.
Ventajas de los azulejos blanco brillo para cocinas
En este punto deberíamos de tenerlo claro, los azulejos blanco brillo son una gran opción para tenerlos en nuestra cocina. Este es un repaso de todas las ventajas que nos va a aportar incluir este producto en nuestra estancia:
- Gran variedad de formas y formatos: cuadrados, rectangulares, hexagonales, irregulares.
- Luminosidad. Independientemente del tipo de luz que llegue a nuestra estancia, los azulejos blanco brillo conseguirán potenciarla.
- Fácil limpieza. Una sola pasada será suficiente para dejar la superficie como nueva, lo que te ayudará a ahorrar tiempo y esfuerzo.
- Carácter y personalidad. Un azulejo blanco brillo no tiene por qué ser aburrido, aprovecha los relieves, decorados y mallas para revestir una pared decorativa alejada de la zona de trabajo e incluir una barra de desayuno o un espacio para comer que se complemente con tu estilo de vida.
- Combínalo como quieras. La neutralidad del blanco brillo es perfecta para combinarla con cualquier estilo o color que elijas, no tengas miedo a experimentar.
- Sensación de espacio. El blanco brillo es una opción excepcional cuando queremos aportar amplitud a una estancia.
Cómo combinar azulejos brillo con muebles de la cocina
Ya nos hemos decidido, el azulejo blanco brillo es una opción genial para integrar en nuestra cocina, pero ahora nos asalta una gran duda “¿Cómo puedo combinarlo con los muebles?” La respuesta es muy sencilla, desata tu creatividad.
Una de las mejores características del azulejo blanco brillo son las posibilidades que nos ofrece en cuanto a integración en diferentes espacios: industrial, moderno, rústico, clásico… Los límites están donde nosotros decidamos. Indistintamente de si elegimos materiales naturales, metálicos o colores vivos, el blanco brillo complementará el diseño de una manera natural.
Un truco genial es combinar los azulejos blanco brillo con muebles en acabado mate. Los muebles de la cocina suelen tener mucho contacto con las manos, mascotas y otros elementos, por lo que es normal que las huellas y la suciedad resalten más sobre las superficies brillantes y cueste tener nuestra cocina impoluta. Si elegimos nuestros muebles con un acabado mate, mitigaremos una gran parte de este inconveniente. Además, por norma general, los muebles con acabado brillo son más propensos a sufrir un desgaste prematuro: los rallones y descascarillados pueden aparecer con facilidad cuando rozamos sus superficies, especialmente en cantos y esquinas. Delegar el blanco brillo a los azulejos, puede ser una gran solución para prolongar la vida útil de nuestra cocina sin renunciar a incluir este gran acabado en nuestra estancia.
